La vida es combatir
sin motivo de temor,
sin querer mirar en pos,
hasta el triunfo conseguir.
Terco y rudo esgrimiré
como lanza mi razón,
como escudo condición
¡como roca surgiré...!
No caeré... al dolor jamás,
jamás me humillaré.
Las estatuas surgen de... de la dura y fría roca,
sólo a base de martillo y cincel.
Tiempo escucha...
Escrito no hay un final.
¡Miedo renuncia!
Mi alma aún libre será.
Dama fría sin color.
Busca y lucha su por qué.
De entre sombras renacer
cual sublime resplandor.
Hoy mi rabia es vendaval,
mi camino maldición,
compañero el corazón,
mis pisadas huracán.
Si he de caer... humillado
nunca más me rendiré.
Me aprisionará el honor en la torre de mi orgullo
y aplastado en sus escombros moriré...