Se atora el tango en sus venas
Y en mis penas, se arrincona,
Y en el sonar que desgarra
Se hacen garra, sus aromas...
La flor ausente del amor
En mi dolor clavó su espina,
Ya nunca más he de volver
A su querer ni a aquella esquina.
Se atora el tango cansado
Y a su lado, muero yo.
Hoy al recordarla...
En el alma siento que llegan lamentos
De amores lejanos.
Y en los bandoneones...
Noto que enredadas, las notas cansadas
Me dicen: ¡Hermano!.
Hoy al recordarla...
Iré en mi locura, por calles oscuras
Que saben mi angustia.
Que noche más triste...
Surgen los recuerdos y en sombras me pierdo
Llorando su amor.
Se atora el tango en sus venas
Y en mis penas, se hace herida,
Siguen sus notas tristonas
Que se asoman a mi vida.
Mientras solloza el bandoneón
Mi corazón... ¡Se desespera!
Porque no encuentra en su dolor
Aquel calor, de la que espera.
Se atora el tango cansado
Y a su lado, muero yo.