Para que sepas, cómo me siento,
y te imagines, todo mi llanto.
Para que un día tú también veas en tus carnes padecer
toda esta angustia que me has causado.
Para que sepas que llevo a fuego
marcado una y otra vez este tormento,
pues ya deshecho ya mi fe
yo ya no estoy para entender,
no digas nada, no lo consiento.
Y ya sabes
que en esta vida todo se acaba pagando
y aunque te ocultes el destino habrá encontrado
tus lágrimas de amor.
Y ya sabes
que yo no estoy para servirte aquí a tu antojo.
Y te aseguro que derramarán tus ojos,
más lágrimas de amor.
Para que sepas mi sufrimiento
voy a decirte así de claro
que no es tan fácil perdonar
a quien te tanto te hizo llorar
de eso recojas lo que has sembrado.
Para que entiendas lo que he pasado
ahora soy yo quien te está despreciando
ya no hay cabida para ti,
cerré la puerta ya por fin,
tú muerde el polvo y yo me aparto.
Y ya sabes
que en esta vida todo se acaba pagando
y aunque te ocultes el destino habrá encontrado
tus lágrimas de amor.
Y ya sabes
que yo no estoy para servirte aquí a tu antojo.
Y te aseguro que derramarán tus ojos,
más lágrimas de amor.
Y ya sabes
que yo no estoy para servirte aquí a tu antojo.
Y te aseguro que derramarán tus ojos,
más lágrimas de amor.